•Esta actividad busca fortalecer la estructura psicológica de los estudiantes para que sean más resilientes a la ansiedad, depresión, agresividad, al uso de alcohol, drogas y embarazos no deseados
• La dinámica, llevada a cabo en “el jardín de colibrí-terapia”, consiste en fomentar un vínculo socio afectivo de humanismo crítico que favorece el desarrollo creativo de adolescentes y jóvenes
• Los estudiantes encuentran otras vías para su desarrollo humano y crecimiento, algo que los potenciará como seres humanos: Blanca Prado
Docentes del Instituto de Educación Media Superior (IEMS), plantel “Francisco J. Múgica”-Tlalpan 1, emplean Colibrí – terapia, herramienta psicológica para fomentar el desarrollo humano de los alumnos, donde se incluyen la enseñanza y el aprendizaje emocional, así como el conocimiento de la fauna y flora de la localidad.
Para ello, el plantel ha organizado diversos concursos que han tenido como fuente de apoyo la Colibrí – terapia, con el fin de fortalecer la estructura psicológica de los estudiantes para que sean más resilientes a la ansiedad, depresión, agresividad, al uso de alcohol, drogas y embarazos no deseados.
La estrategia consiste en que el alumno aprenda a respirar y en el proceso empezar a autoobservarse y ver lo que está fuera de él; un factor adicional les enseña a agradecer para guiarlos hacia una educación para la paz. Con esta práctica diaria la persona se fortalece y gestiona sus emociones.
Las prácticas se realizan en un espacio que se conoce como “el jardín de colibrí-terapia”, diseñado y creado por docentes y alumnos, donde se plantan especies que regularmente son visitadas por los polinizadores.
Se trata de un escenario natural que promueve tonos emocionales benéficos que les permite una restauración mental que favorece el aprendizaje; además, abre paso a su propio conocimiento, a sus compañeros y a la formación de vínculos.
Para ello se realizan actividades guiadas por el tutor para orientarlos al autoconocimiento y fortalecer su autoestima, y el colibrí, ave excepcional, es el mejor elemento para apoyarlos y cuya dinámica consiste en fomentar un vínculo socio afectivo de humanismo crítico que favorece el desarrollo creativo de adolescentes y jóvenes.
De acuerdo con la filosofía en la que se sustenta el jardín, se trata de un antídoto natural contra trastornos mentales, como la depresión y la ansiedad. La gran mayoría de plantas que polinizan estas aves son medicinales y muchas de ellas aromáticas, algo que crea un ambiente que ofrece una sensación de paz y bienestar.
Las temáticas propuestas de los trabajos ganadores se orientaron a problemáticas teóricas o prácticas de su entorno; ideas o perspectivas innovadoras para solucionar temas específicos del entorno o la comunidad; y planteamientos de una o varias disciplinas que respondan a una necesidad de la sociedad.
Por lo anterior, es que estudiantes de dicho plantel fueron premiados tras haber participado en tres concursos donde expresaron su arte, talento y creatividad.
En cuanto a los certámenes en los que las y los estudiantes participaron fueron: • el Primer Concurso Humanismo Crítico y Creativo en TikTok, al que convocaron al Instituto Nacional de Psiquiatría “Dr. Ramón de la Fuente Muñiz”, el cuerpo académico de colibrí-terapia, la Cátedra María Acaso y el canal de podcast Radio Colibrí; • el Primer Concurso de Pintura Mural Tlalpan 1; • la Final de Talentos.
En el concurso de TikTok, el jurado evaluó expresión oral, habilidad corporal o kinestésica, habilidad de lenguaje no verbal o paralingüístico; los y las ganadores fueron Brenda Hernández Rodríguez y Jimena Medina Rosales, quienes abordaron una problemática relacionada con la sustentabilidad.
En el Primer Concurso de Pintura Mural Tlalpan 1, que tiene como finalidad retomar la filosofía institucional, el significado de pertenencia y la figura histórica del general Francisco J. Múgica, al igual que promover la cultura, la creatividad y expresión de la comunidad, otorgó el primer lugar a Miqueas Salatiel Magaña Cedillo por su propuesta visual “La vida de Francisco J. Múgica”; y menciones honoríficas a “Gaman”, de Mónica Martínez Martínez, y “Colibríterapia”, de Karen Vianney Calderón Ramírez y Ángel Rafael Onofre González. Todas las propuestas plásticas se realizaron en vinyl.
La Final de Talentos, que tuvo lugar en el auditorio del plantel, ofreció un programa artístico versátil, en el que los y las estudiantes participantes dieron muestras de sus habilidades y destrezas, como baile, canto y danza. El primer lugar de esta competencia se lo llevó Mauricio Alberto Santamaría, mientras que Anjel Jair Blancas y Mauricio Martínez Martínez reciberon las menciones honoríficas.
De acuerdo con Blanca Prado, docente tutor investigador de la Academia de Biología en IEMS Tlalpan 1, si se logran los objetivos de la colibrí-terapia el estudiante será capaz de reconocerse como una persona satisfecha, plena como ser humano y con mejores condiciones para atender sus asignaturas escolares y permanecer hasta lograr su egreso.
Con el jardín también se atiende la conservación del ave; su utilización como herramienta didáctica y terapéutica; y un modelo in situ para atender una problemática ambiental, área en la que el estudiantado tiene la posibilidad de aplicar sus conocimientos.
“La colibrí-terapia apoya los concursos de TikTok, pintura mural y talentos porque quiere que los estudiantes encuentren otras vías para su desarrollo humano y crecimiento, algo que los potenciará como seres humanos”, dijo Prado, quien junto con el doctor en psicología Arturo Ortiz Castro, investigador del Instituto Nacional de Psiquiatría son los creadores de este concepto terapéutico.