● El Museo Archivo de la Fotografía y el Centro de la Imagen presentan una muestra de la última faceta del fotógrafo mexicano en el Valle del Mezquital, Hidalgo, en 1986
● Se puede disfrutar de una muestra de 32 imágenes impresas en plata sobre gelatina que el artista capturó en Ixmiquilpan, Tasquillo y Alfajayucan
El Museo Archivo de la Fotografía, institución perteneciente a la Secretaría de Cultura capitalina, en colaboración con el Centro de la Imagen, a cargo de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, presentó este miércoles 29 de noviembre, en el marco de la Noche de Museos, la exposición El ojo y el corazón. El andar de Nacho López por el valle del mezquital, muestra que celebra el centenario del natalicio del reconocido fotógrafo mexicano.
El acto inaugural contó con la participación de la hija del artista, Citlalli López, la fotógrafa Elsa Medina, así como del curador de la exposición César Carrillo Trueba en compañía de la directora del Centro de la Imagen, Johan Trujillo Argüelles; la responsable del Museo Archivo de la Fotografía, Lizbeth Ramírez Chávez y del director general de Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural de esta dependencia, Francisco Javier Martínez Ramírez.
“La idea de esta exposición es mostrar esta sencillez y gran belleza que logró (Nacho) a lo largo de su trabajo y esta dignificación del Valle del Mezquital, que siempre fue presentada como la zona más atrasada del país, como el ejemplo de la pobreza, el anacronismo, marginación y miseria, cuando Nacho López llega logra imágenes de una dignidad que contrastan y rompen con todos estos esquemas”, explicó en curador.
Citlalli López agradeció a ambas instituciones el apoyo para recordar el legado de su padre a través de un recorrido por 32 fotografías, procedentes del Acervo Documental y Artístico de Nacho López, que muestran al público la última faceta de su trabajo fotográfico en el Valle del Mezquital, Hidalgo, en donde capturó distintas imágenes en Ixmiquilpan, Tasquillo y Alfajayucan, tierras más áridas que las del sur del valle y de mayor población indígena.
En su oportunidad, Elsa Medina recordó que muchas de estas imágenes se imprimieron en su laboratorio por lo que representa para ella un viaje en el tiempo recordar los negativos y escuchar los consejos y críticas que López hacía a sus primeras fotografías tomadas por ella en el Taller de análisis de la imagen.
Asimismo, previo al corte de listón, los integrantes del presídium recordaron a Nacho López como un amigo de los pueblos indígenas que logró una sencillez estética que le permitió retratar lo cotidiano como ritual y lo ritual como cotidiano alejado del folclore y la fiesta con el objetivo de integrarse a la comunidad.
Los visitantes pueden, a través de las fotografías, conocer la Festividad de Corpus Christi Naxthéy, las labores campesinas y los canales de riego del Valle del Mezquital, además de las labores textiles de las mujeres, una pintura rupestre en Mandodó San Antonio Tezoquiapan y su barranca, introducidos por un retrato del fotógrafo capturado por su alumna Elsa Medina.
Ignacio López Bocanegra, mejor conocido como “Nacho” López, es considerado uno de los máximos representantes de la fotografía mexicana, mayormente por sus reportajes fotográficos que conforman una vasta crónica de la Ciudad de México pero, también, por sus reportajes etnográficos que representan una rica veta dentro de su producción artística, los cuales inició con su primera visita a Janitzio, Michoacán, en 1950.
En casi cuatro décadas de trabajo, Nacho López viajó a la sierra Tarahumara, recorrió varias veces los Altos de Chiapas, convivió largo tiempo con los ayuuk en la sierra mixe de Oaxaca, fotografió ceremonias entre los wixárika de Jalisco y la vida cotidiana de los chontales en Tabasco, así como también entrevistó a viejos zapatistas y filmó algunos cortometrajes para el entonces Instituto Nacional Indigenista (INI) y documentó la vida de los campesinos que llegaban a la Ciudad de México en busca de una mejor vida.
Hacia los años setenta contribuyó a la formación de estudiantes y la conformación de un plan de estudios en la recién creada Facultad de Artes Plásticas que resultaría en la creación de la Licenciatura en Fotografía, carrera pionera en su tiempo.
El ojo y el corazón. El andar de Nacho López por el valle del mezquital podrá visitarse hasta el 11 de febrero en el Museo Archivo de la Fotografía, ubicado en República de Guatemala 34, Centro Histórico, Alcaldía Cuauhtémoc. Entrada Libre.
La oferta de la Secretaría de Cultura capitalina se puede conocer en su página oficial (https://cultura.cdmx.gob.mx/), la Cartelera de la Ciudad de México (https://cartelera.cdmx.gob.mx/) y a través de sus redes sociales en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube).